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URBAN: What A Thug Wants

Page 105

by Shantel Johnson


  Capítulo Ocho: augustina

  "Siiii, bebé; Así como así. "Gemí mientras Roderick besó por mi cuerpo mientras me desnudaba.

  "Esta es la última vez." Beso. "No podemos seguir con esto." Beso. "No importa lo bien que se siente." Beso. Él continuó.

  "Sólo cállate y hazme el amor." Le pedí mientras me sentaba y le arrancó la camisa y se bajó los pantalones a sus boxeadores solamente estaban encendidas.

  Me senté en la cama y se enfrentó a su virilidad. Me puse de pie y lo besé apasionadamente en los labios mientras se frotaba mi cuerpo por todas partes. Poco a poco me di un beso por el pecho, más allá de su ombligo. Miré hacia él mientras besaba su parte superior del muslo a través de sus boxeadores. Alcancé el interior del agujero en calzoncillos y saque la carne perfectamente envasados que he estado anhelando desde la primera vez que lo vi. Estoy decidido a hacer la mía Roderick. Pero por si acaso esta es la última vez que lo veo en un rato, voy a asegurarse de que recuerda este momento para siempre. Me saqué la lengua y empezó a lamer alrededor de la cabeza de su pene. "Mmm." Gemí mientras empujaba suavemente la cabeza hacia atrás para poder quitarse los calzoncillos. Continué mi trabajo con mi lengua, y luego envolví mis labios suaves por completo alrededor de su eje. Me di cuenta de que se sentía bien con él porque desencadenó mi pelo fuera de su cola de caballo y se agarró en su mano. Se tomó su larga pipa de la boca y me dijo donde reclinar la cabeza hacia atrás. Haciendo lo que me dijeron, agarró las diez pulgadas de su pene y comenzó a acariciarlo mientras me ordenó a jugar conmigo mismo. Con una mano en el pecho y la otra mano en mi tarro de miel, que todavía mantiene la cabeza hacia atrás como se ordenó. Roderick luego tomó su pene y lo colocó en la punta de mis labios y me dijo que abriera amplia. Abrir la boca tan ancha como pude, le permití entra en mí todo el camino de vuelta a mi garganta, haciendo que me gag un poco. No queriendo desagradarle, le permití a la mierda mi cara tan áspero y duro como él quería. Él entraba y salía de la boca de él cada vez mayor a una pulgada más duro. "Aaaah mierda. Reducir la velocidad. "Dijo mientras soltaba el pelo. "Tumbó en la cama." Una vez más, hacer lo que me han dicho, que puse en la cama con mis piernas abiertas, esperando a que él entra en mí. Se subió entre mis piernas y comenzó a hacer un ritmo que le alivió de entrada y salida. Sintiéndome a punto de llegar, me cambió de posición y se subió encima de él. Tengo en la posición de vaquera inversa y molido contra su pelvis, haciendo que mi clítoris para saltar con cada movimiento. Agarrando mi cintura, Roderick guió mi ritmo. Yo estaba en el cielo puro en ese momento. Ambos de nosotros al borde de un orgasmo, que fue más rápido hasta que ambos escuchamos una voz que nos sorprendió.

  Capítulo Nueve: CEENA

  "Oh no, no se detienen porque estoy aquí." Dije mientras me abría la puerta. Yo reconocí la voz de la mujer de forma automática cuando entré. Era Agustina. Esta perra, mi enemigo. ¿Cómo se atreve Roderick engañar a mí con esta perra triflin '. Debería haber dejado que esa pareja a matar en su propia tienda, me dije a mí mismo.

  Mi corazón estaba saltando en el pecho. Me sentía como que iba a explotar. Allí mismo, en mi propia cara, vi con mis propios ojos y oído con mis propios oídos, mi propio hombre, haciendo el amor con otra mujer. Sé que no puedan haber entregado él gran parte de mi tiempo últimamente, pero yo estaba tratando de hacernos suficiente dinero para que pudiéramos hacer lo que sentimos en un momento dado y también para formar una familia. Me encantó Roderick con todo mi corazón, y para él hacer esto, sólo significa que hay una manera de salir de esto. Uno de nosotros debe morir.

  Por alguna razón, mi clítoris comenzó a sentir un cosquilleo. No he tenido relaciones sexuales en los meses tampoco, pero no iba a salir y engañar a Roderick como que está haciendo a mí. La decisión de que quería hacerlos sufrir y también tener un poco de placer de mi propia, decidí dar una sacudida eléctrica con un giro de los acontecimientos.

  "Ceena, puedo explicarlo. Por favor, escúchame antes de hacer algo loco. "Declaró Roderick. Me quedé allí con una sonrisa en mi cara, como Cepillé las lágrimas. Su suplica caían en oídos sordos.

  "Cállate, Roderick." Le grité mientras caminaba cerca de la cama donde estaban ambos tratando de ocultar sus cuerpos desnudos.

  "Yo sabía que algo estaba pasando con ustedes dos. Debería haber visto el primer día que se conocieron. Ella era todo desde el primer día. "Le dije a Roderick.

  "Escucha, Ceena. Me conozco y no se puede ver a los ojos, pero quiero que sepas que lo siento, y yo no hice esto para hacerte daño. "Dijo Augstina.

  "Perra, a mantener su lástima. Yo no lo quiero. "Respondí. "Lo que sí quiero es para que usted consiga aquí."

  "¿Eh? ¿Para qué? Lo que usted tiene que bajar de su pecho debe estar entre usted y Roderick. Él es el único que le debe una explicación, no yo. "Ella continuó.

  entonces yo saqué los nueve mili había decidido recibir de mi guantera en el último minuto. Sonreí y le mostró como apunté al tanto de ellos.

  Roderick trasladó a tratar de llegar hacia mí. "No, Ceena. No haga esto. Esto no es usted. "Dijo. "No ha estado tomando sus medicamentos desde que nos mudamos aquí, y si lo fueras, sabrías que esto se puede solucionar. Usted no quiere salir así. Dame el arma. "Él dirigió.

  Seguí sonriendo, pero di la finalidad directamente a él. "Sentarse la cogida hacia abajo, Roderick."

  Él hizo lo que le dije. "Ahora, de nuevo, Augstina, ven aquí." Le ordené. Ella comenzó a llorar, pero hizo lo que le pedía. Empecé a quitarme la ropa hasta que estaba completamente desnudo al igual que estos dos.

  No está seguro de lo que iba a ocurrir a continuación, Roderick se empujó contra la cabecera y trató de no moverse, miedo de que me iba a dejar la pistola se apaga. Agustina estaba ahora frente a mí. Apunté la pistola en la frente.

  "Tumbó en la cama." Ella hizo lo que le pedía. "Saca la lengua." Una vez más, ella escuchó. Me subí encima de ella y empezó a chupar sus pezones marrones dulces. "¿Es esto lo que haya disfrutado de poner en su boca, Roderick?", Pregunté.

  Él no respondió, por lo que apuntó el arma hacia él una vez más. "Dije, es esto lo que le gusta chupar?" Él negó con la cabeza.

  Seguí a lamer y chupar los pezones Agustina 'y, sorprendentemente, ella gimió. Me alivió mi vagina hasta que su lengua se mantiene pegado a cabo ya que había pedido. Me sacudió lentamente mi coño a través de la lengua, lo que hizo que el rock mis caderas como se sentía bien al ser tocado de esta manera.

  "Mmm, hacen que la lengua más difícil para mí." Dije mientras molido en su lengua, la nariz y los labios, haciendo que me cum espalda con espalda. Podría decir Roderick estaba disfrutando del espectáculo como su pene se animó. Estiré la mano y agarró su pene y comenzó a chupar, aún con la pistola en la mano.

  Después de que todos estaban satisfechos y aliviados de esta fantasía sexual, les dije a levantarse y sentarse en el suelo. Miedo, todavía hicieron lo que pregunté. Nos sentamos en el suelo juntos ahora. Roderick estaba en lo cierto. No he estado tomando la medicación para el trastorno bipolar que he estado sufriendo de desde que era un adolescente. No sé si eso estaba influyendo en mi decisión en mi próximo movimiento, pero siempre digo que hacer el último movimiento, lo mejor posible.

  Empecé a jugar "Eeny, Meeny, miny, moe", decidiendo que Moe, iba a ser lo que era recibir un disparo en primer lugar. El Moe se detuvo en Roderick. Auge. Le disparé a quemarropa. Se cayó hacia atrás, con los ojos todavía en el techo. Inmediatamente Agustina comenzó a gritar, por lo que apuntó el arma hacia ella y le exigió que cierra la boca o ella iba a sufrir una muerte larga y dura.

  Una vez más, canté la canción infantil; Lo único es que, se suponía que parar en Agustina. A la mierda. Yo la oportunidad de todos modos. No hay manera iba a disparar a mí mismo primero antes de que me tiro esta puta. Podía oír las sirenas en la distancia; Supongo que los disparos eran demasiado alto para su bloque de silencio.

  Esperé unos minutos hasta que vi las luces intermitentes fuera de la casa. La decisión d
e tomar la ruta honorable, decidí llevar a mi misma. Auge. Me voy de esta Tierra con una sonrisa en mi cara. No todas las historias de amor tienen un final feliz para siempre. Amo a Roderick suficiente como para tener que muera conmigo para que podamos estar juntos para siempre en nuestra vida futura.

  Como pude escuchar a la policía entrar en la casa, mis ojos se borrosa, y todavía estaba murmurando "Eeny, Meeny, miny, moe".

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  LOVE IN THE PROJECTS

  (FRENCH TRANSLATION)

  Shantel Johnson

  © 2015 Sensual Ink Publishing

  Chapitre 1

  "Ashes to Ashes, la poussière à la poussière. Le Seigneur donne et enlève ... "La voix du prédicateur noyés. Les larmes de Giselle Rogers étaient non-stop. Elle ne pouvait toujours pas y croire. Il sentait comme si elle était dans ce cauchemar qu'elle ne pouvait pas se réveiller. Comment est-ce que maintenant elle se tenait devant les cercueils de ses parents? Il y a tout juste une semaine, elle a supplié son père pour de nouvelles chaussures, tandis que sa mère se plaignait de la façon dont son père a été la gâter, et comme ça, ils ont tous deux avaient disparu. Comment est-elle arrivée ici? Comment?

  Giselle Rogers est de 16 ans de la Caroline du Nord. Elle était un meneur, un érudit étudiant, et juste un peu gâté par son père. Son père Enzo Rogers était un homme d'affaires travaillant dur. Il a ouvert son premier magasin en tant que mécanicien quand il avait 20 ans. Il avait toujours été bricoler avec des voitures toute sa vie, alors quand il a gagné un peu d'argent dans un gratter, il a ouvert l'entreprise. Parole obtenu autour de la ville sur la façon dont l'homme qu'il était, et il a eu plus de clients alors qu'il pouvait gérer. Puis, avec l'argent qu'il a gagné, il a ouvert un autre magasin, et bientôt une autre. La prochaine chose qu'il savait, il avait une chaîne de magasins de réparation et il a commencé à enseigner aux gens ses compétences. Sept ans dans l'entreprise, il a rencontré Karen.

  Karen était un caissier de banque. Il marchait là qui cherchent à faire des dépôts pour l'ensemble de ses entreprises. Il pensait que ce serait juste un autre jour régulière; juste faire une course. Tout fonctionnait bien, jusqu'à ce qu'il leva les yeux et vit. Ses longs cheveux a été brossé sur le côté et il ne pouvait pas arrêter de regarder ses yeux en amande et des lèvres pleines.

  «Puis-je s'il vous plaît aider le client suivant?" Elle a demandé. Il marchait droit vers elle avec un sourire sur son visage. "Bonjour monsieur, comment puis-je vous aider?"

  "Vous pouvez ..." Soudain, les mots quitté son cerveau. Enzo était un homme robuste de haut. Les gens ont souvent plaisanté et l'appelaient le bûcheron noir. En dépit d'être ce grand gars, il rétréci en face de Karen.

  "Oui, monsieur?" Elle lui a demandé poliment. Elle ne voulait pas une ligne de construire et d'avoir son manager sur son cul.

  «Puissiez-vous s'il vous plaît déposer ceux-ci dans les comptes?" Il n'a même pas la regarder. Il vient de signer les bordereaux. Quand elle a fini, il a saisi les recettes et pratiquement manqué. Il a fallu attendre deux semaines plus tard, qu'il a fait des dépôts, et a rassemblé le courage de lui demander de sortir.

  Leur relation a commencé à ralentir. Elle avait une règle de 120 jours. Il devait y avoir pas de sexe du tout. Elle avait le cœur brisé avant et elle voulait prendre son temps. Au début, il a accepté de ce parce qu'il était tout simplement heureux d'être à sortir avec elle, mais il était heureux qu'il a fait. La règle leur a donné le temps de se connaître les uns les autres. Un an plus tard, ils étaient mariés et il ne fallut pas longtemps avant que Giselle dans l'image. Après la naissance de son daugher, Enzo voulait être à la maison plus, donc il a vendu ses entreprises et juste concentré sur l'enseignement des compétences à la mécanique futures. Ils vivaient dans une grande et belle maison, et tout était super ... pour le moment.

  Karen avait toujours voulu aller à New York City. Il y avait quelque chose sur les immeubles de grande hauteur et les lumières qui vient de lui a fait sentir comme une petite fille. Donc, pour leur anniversaire, Enzo réservé un immense voyage pour toute la famille à New York.

  «Pourquoi ne puis-je rester ici?" Giselle plaint alors qu'elle fait ses valises. "Je me plais beaucoup ici. J'entendu New York City est rien d'autre que des rats et de la saleté. Pourquoi quelqu'un voudrait-il y aller? "

  "Parce que nous pouvons aller voir l'Empire State Building. Nous pouvons aller voir la Statue de la Liberté et il y a de grands musées ".

  "Alors?"

  "Et puis nous pouvons aller faire du shopping." Enzo a ajouté l'appât qui était sûr pour l'attirer dans.

  "Yay!" Elle a applaudi dans la même attitude comme elle le faisait comme un enfant en bas âge.

  "Ugh!" Karen roula des yeux. "Il est de votre faute si cet enfant est gâté pourri."

  «Vous êtes supposé gâter vos enfants."

  "Non, vous êtes supposé de leur enseigner des compétences sur la façon de survivre. Cette fille ne sait même pas comment faire la lessive ".

  "Et elle ne devra jamais tant que je suis là."

  Giselle voulait, elle pourrait revenir à ce moment-là. Elle voulait juste revenir à ce moment-là. Si seulement elle pouvait fermer les yeux assez dur, cliquez sur ses talons assez dur, et qui souhaitent simplement assez dur, peut-être qu'il va changer. Elle ne comprenait pas comment on accident de voiture a changé tout cela. Il a suffi d'un conducteur ivre, un mauvais tournant, et son monde a changé.

  L'enterrement a commencé à envelopper et plus il est arrivé à la fin, plus sa réalité né sur elle. Elle était maintenant orphelin. Comme ses parents, elle ne possède pas de frères ou sœurs ou des cousins. Il y avait une conférence sur les grands-parents, quelque part dans le New Jersey, mais elle n'a jamais été donné de détails. Ce qui allait lui arriver maintenant? "

  "Miss?" Le prédicateur était assis à côté d'elle. Ils étaient les seuls. Les cercueils étaient déjà descendus dans le sol. "Voulez-vous jeter la saleté?" Il a suggéré alors qu'il fermait la bible. Giselle lui lança un regard incrédule. Elle ne pouvait pas croire ses paroles, mais tout cela était encore un peu surréaliste. Elle se leva et jeta la poussière sur le dessus de leurs cercueils. Elle regarda au loin et a vu le SUV noir. Elle se dirigea vers lui et a frappé à la fenêtre.

 

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